La nueva estación resulta un gran momento para proteger nuestro organismo e hidratarlo desde dentro. Además las frutas de esta temporada nos harán un poco más fácil la “operación bikini” por su aspecto apetecible y, cómo no, por sus propiedades. ¡Empezamos!

Fresas

La fresa es una de las frutas de mayor contenido en antioxidantes, curiosamente localizados en las pepitas de su piel. Además son ricas en hierro y magnesio lo que le hace ideal para curas de remineralización. Además es una  magnífica fuente de vitaminas C, K y ácido fólico. Y lo mejor de todo: es una fruta con pocos azúcares por lo que es apta para aquellos que deben vigilar la ingesta de éstos. Propiedades: antioxidantes, antiinflamatorias, saciantes y diuréticas. No se recomienda a personas con colon irritable o piedras en el riñón.
 

Cerezas

Como ocurre con las fresas, aportan antioxidantes. Son una fuente abundante de hidratos de carbono, especialmente de fructosa (el azúcar bueno). También destaca su alto contenido en potasio y fibra así como de vitaminas A, B1 y B6, C y E. Propiedades: antioxidantes, antiinflamatorias, reducen niveles colesterol y triglicéridos, saciantes, laxantes y diuréticos. Al ser un buen depurativo, es ideal para combatir el estreñimiento, la obesidad, la artritis y la arteriosclerosis. 

Arándanos

Este fruto silvestre es también una de las frutas con mayor poder antioxidante y con ello gran capacidad de absorción de radicales libres. Es también rico en manganeso, vitamina C y algunas del grupo B. Propiedades: antioxidantes, antiinflamatorias, antisépticas (frenan las infecciones de orina) y anticancerígenas. Cabe destacar que es un buen aliado a la hora de controlar problemas de hipertensión, lo que contribuye a prevenir enfermedades circulatorias. 

Melón

Emparentado con el pepino, la calabaza y el calabacín, esta fruta está compuesta en su mayor parte por agua (en torno a un 85%). Es bajo en calorías así como en fibra, grasas y proteínas. Por otro lado tiene un alto contenido en beracaroteno (esencial para fabricar vitamina A), vitamina C y B9. También es rico en potasio, fósforo y magnesio. Propiedades: antioxidantes, depurativas (diuréticas y laxantes) y antirreumáticas. Es muy recomendable en tratamientos contra la obesidad y la diabetes.

Albaricoque

Esta fruta es rica en vitaminas A y C así como en antioxidantes que protegen nuestro cuerpo del daño celular provocado por los radicales libres. Igualmente su alto contenido en calcio ayuda al desarrollo de los huesos. Debido a que son bajos en calorías y ricos en fibra, suponen un poderoso recurso a la hora de perder peso. Propiedades: antioxidantes, relajantes, laxantes y antianémicas debido a sus pequeñas cantidades de cobre que ayudan al cuerpo a absorber el hierro de los alimentos.

Nísperos

De ligero toque ácido, los nísperos resultan un buen complemento en las dietas de adelgazamiento debido a su bajo contenido calórico y a su escaso aporte en proteínas e hidratos de carbono. Son una importante fuente de potasio, calcio y vitaminas B1, B2 y C. Su alto contenido en fibra ayuda, además, a reducir los niveles de colesterol. Propiedades: antioxidantes, antivirales, digestivas, astringentes, antiinflamatorias y diuréticas. Además, ayudan a rebajar los niveles de colesterol alto.

Aguacate

Originario del continente americano, esta fruta tiene una alta concentración de grasas (en torno a 23%), aunque éstas resultan ser del tipo más sano (monoinsaturadas) al igual que las del aceite de oliva. Cabe destacar su alto contenido en vitamina E, lo que ayuda a  mantener estables los niveles de colesterol y el buen funcionamiento del sistema circulatorio. Propiedades: nutritivas, relajantes y saciantes. Cabe destacar su alto contenido en potasio (mayor que el del plátano) lo que ayuda a reducir la presión sanguínea.

Melocotón

Originaria de China, esta fruta es muy rica en betacaroteno (provitamina A) así como de vitaminas C y E. Tienen un alto contenido en potasio, fósforo, magnesio y hierro. Su alta composición a base de agua y sus prácticamente nulas grasas hacen de esta fruta una fuente de bajo valor calórico. Propiedades: nutrientes, digestivas, diuréticas y antioxidantes. Debido a la presencia de carotenos y luteína, favorece la salud ocular previniendo la formación de cataratas.

Directamente, en zumo o como parte de algún dulce, las frutas de primavera son un gran aliado para tu salud y la de los tuyos... Por eso desde aquí te invitamos a reforzar tu ingesta de fruta esta temporada y a buscar nuevas maneras creativas de incluirlas en los hábitos de los más pequeños de la casa.

¡Muchas gracias por leer hasta aquí y muchos besos!